Representar de forma visual a las distintas personas e instituciones que tienen relación con un servicio o un problema. De esta forma, poder identificar las relaciones entre ellas y analizar cómo serán consideradas en el proceso de investigación.
Aplicar un filtro de selección al finalizar el ejercicio, priorizando a los actores más relevantes y abordables en el marco de un proceso de investigación. De esta forma se podrá identificar las relaciones y analizar cómo serán consideradas en el desarrollo del proyecto. Idealmente, tener en cuenta entre cinco y 20 actores.
1. Convocar al equipo del proyecto a una sesión de trabajo.
2. Explicar a las personas asistentes el problema inicial, con las características señaladas en la Herramienta 2 (Definición de un problema inicial).
3. Identificar en el mapa a todas las personas usuarias, actores, áreas, organizaciones u otras que tengan alguna relación con el problema. Anotar cada uno en un post-it.
4. Agrupar por similitud a los actores, personas u organizaciones identificadas.
5. Organizar los actores en el mapa de acuerdo a la siguiente categorización:
6. Revisar si existen relaciones entre ellos y plasmar esas relaciones en el mismo mapa. Esto ayudará a visibilizar las interacciones entre los actores.
7. Identificar los grupos que debemos convocar para realizar nuestra investigación del problema y que serán parte de la Herramienta 5 (Plan de investigación).
8. Realizar un plenario final para exponer el mapa elaborado, dar a conocer el trabajo realizado y validar las relaciones identificadas.
Definir y guiar un proceso de investigación acotado para profundizar en el problema inicial, entendiendo las necesidades y expectativas de las personas usuarias y aquellos actores identificados en la Herramienta 4 (Mapa de usuarios a investigar). Para ello, se definen hipótesis, usuarios por investigar, técnicas, tareas y responsables.